Le dediqué mucho tiempo,
importancia, cariño y atención a
personas que no se merecían ni un
sólo segundo de mi vida.




Todos tenemos alguna manera de desahogar las
penas: unos comen, otros lloran, otros fuman, otros beben,
otros se cortan..




Nada es para siempre,
el café se enfría,
el pucho se apaga,
el tiempo pasa
y las personas CAMBIAN.





"Muchas veces se sufre más con los pensamientos que con los sentimientos", sentencia con los ojos en blanco.






Y tú, ¿Acaso mentías sin saberlo?
¿Fue mentira, también,
aquel primer deslumbramiento?
¿Amabas algo en mi que no era yo,
así como yo, quizás,
amaba tu amor, más que a ti mismo?




“Y necesito verte, pero no te veo, y necesito escucharte, pero no te escucho, y necesito tocarte, pero no te toco, y necesito pensarte, y es lo único que hago.”